Desde siempre me ha parecido curiosa la frase que da título a este post "Pongo mi vida en tus manos".
Me gustaría hacerte reflexionar un poco sobre el contenido de esta frase, su significado, su poder.
El mero hecho de poner algo en las manos de alguien es quitarte la responsabilidad de mantener aquello que pones o das, si yo pongo algo en tus manos te lo estoy dando, te estoy otorgando el poder completo de hacer y deshacer lo que desees con ello. Me quito la responsabilidad de aquello que te entrego, a partir de ese momento sólo tú eres responsable de mantener en las condiciones que desees aquello que te entrego.
Como ejemplo bastaría decirte, pongo en tus manos las llaves de mi coche para que tú te sintieras responsable de este objeto y que lo cuidaras y mantuvieras, es como decir, te hago entrega de mi coche, haz con él lo que desees. Me desentiendo a partir de ese momento del vehículo y espero lo cuides bien, pero es tu responsabilidad, no la mía.
Basta decir que nuestro cerebro no entiende de dobles sentidos, salvo que le pongas a analizar el contenido de la frase de forma detallada, cosa poco habitual. Nuestro cerebro entiende directamente lo que se le dice y en esta frase, estás entregando algo a alguien, le estás haciendo todo poderoso con aquello que le entregas. Repito, tú ya no eres el responsable de ese objeto, artículo o vida, lo es la persona a la que se lo entregas.

"Pongo mi vida en tus manos" sobre todo es usada con dioses, santos o temas religiosos, de tal manera que dejamos en manos de ese "dios" nuestra vida, no se la dejamos a un amigo, familiar o pareja, no, tontos no somos, se la dejamos a un ser "todopoderoso" para que la dirija, para que la controle y que nos guíe en el buen camino. Nos quitamos totalmente la responsabilidad de dirigir nuestras vidas, que las dirija otro. Posteriormente cuando las cosas no salgan como pensábamos o deseábamos bastará con quejarnos o simplemente decir "El señor quiso que fuera así" o "Señor porque me pones esto delante...". Volvemos a quitarnos la responsabilidad de nuestros actos y sus consecuencias.
Como siempre, es decisión tuya si tomas las riendas de tú vida o prefieres dejarlas en las manos de alguien, sea un dios o no. Pero eso sí, no culpes a otro si algo sale mal o no conseguiste aquello que deseas, la responsabilidad de tus actos, de tus decisiones es tuya, sólo tuya.
#unpasoentucamino #jcmt